Título: La casa y el cerebro
Autor: Edward Bulwer-Lytton
Editorial : Impedimenta, año 2013
Traducción: Arturo Agüero Herranz
Lovecraft se refirió a La casa y el cerebro como uno de los mejores relatos de casas encantadas jamás escritos. Y Lafcadio Hearn afirmó que estamos ante la mejor historia de fantasmas creada en lengua inglesa, pues reproduce con asombrosa fidelidad las vivencias de una auténtica pesadilla.La casa y el cerebro se considera una pieza maestra de la literatura sobrenatural. El narrador de esta desasosegante fábula de fantasmas, desoyendo los consejos de sus allegados, decide pasar una noche, junto con su criado y su perro, en una casa encantada situada en Londres, de la que todos los demás huyen despavoridos. Allí, tal y como él esperaba, asiste a una serie de apariciones espeluznantes y descubre, a través de unas cartas, que la casa, muchos años atrás, fue el escenario de unos horribles crímenes. El secreto de todo parece encerrarse en una habitación vacía. Conectada a esta, la voluntad de un ser inmortal y perverso, uno de los que tuvo que ver con la casa en el pasado, ha creado y gobernado a distancia los extraños fenómenos.
Gracias a la Editorial Impedimenta he podido disfrutar de esta pequeña novela. Y como siempre, sólo el libro en sí es ya una joya que nos gusta tocar, que nos gusta abrir por cualquier página y dejar que nuestros sentidos disfruten. Porque, como todos los libros de esta editorial, entran por los ojos, con esas portadas y sobrecubiertas preciosas. Y gusta acercarte el libro y oler sus páginas... Y tocarlo... Es una absoluta delicia leer cualquier libro de esta editorial, por el mimo y el cuidado que todos sus libros desprenden.
En esta novela encontramos dos partes claramente diferenciadas. En la primera parte se nos presenta al protagonista, un caballero inglés, quien muestra un enorme interés por habitar una casa que parece estar encantada. Consigue alquilarla, desoyendo las advertencias del casero. Éste le confiesa que nadie ha logrado pasar en la casa más de dos noches seguidas. Y que incluso los fantasmas se atreven a aparecer bajo la luz del día. Pero nada de esto amedrenta a nuestro héroe. Escéptico a todas estas cosas, está decidido a pasar unos días en la casa y descubrir qué hay tras esos fenómenos. Tal y como pone un pie en ella, los fantasmas parecen despertar. Las escenas de terror se suceden una tras otra. No se anda el autor con rodeos. Ni un segundo hubiera pasado yo en la casa si hubiera tenido que ver solo una tercera parte de lo que nuestro caballero ve. Y sufre... Pero él sí. Se mantiene firme hasta el final. Su mente, analítica, busca respuestas a todo.
La segunda parte empieza el día después de esa primera noche terrorífica. Nuestro protagonista empieza a investigar. Empieza a buscar por toda la casa qué puede provocar todo lo que ha visto. Y en una habitación encuentra unas cartas que revelan unos crueles crímenes que se cometieron en la casa. Y la existencia de un extraño ser, inmortal, por lo que revelan las cartas, que parece ser el causante de todos esos fenómenos. Hipnotismo, mesmerismo, espiritismo... Corrientes que estuvieron muy de moda en el siglo XIX y a cuya influencia Edward Bulwer-Lytton no pudo escapar y en esta parte se dejan notar.
En definitiva, una obra altamente recomendable, sobre todo si os gusta el género y las historias de casas encantadas. Un libro muy breve y ligero de leer que no os va a ocupar más de una tarde. ¿Os animáis a pasar un poco de miedo?