Alas de fuego de Laura Gallego

 

La reina Marla, de sólo diecisiete años, es la soberana de una nación resplandeciente. Ahriel, un ángel femenino, está a su lado desde que nació, con la misión de guiarla y protegerla, y de guardar el equilibrio en los reinos humanos. Pero cuando descubre una conspiración para iniciar una sangrienta guerra, Ahriel es traicionada y encerrada, con las alas inutilizadas, en la espantosa prisión de Gorlian, un mundo primitivo, salvaje y brutal, de donde nadie ha logrado escapar jamás. Ahriel deberá aprender no sólo a sobrevivir en Gorlian, sino también a ver las cosas desde el punto de vista humano... a ras de suelo.

Tenía a esta autora pendiente desde hace muchos años, y ha tenido que ser gracias a Sombrerera que me haya animado por fin a empezar a leer alguna de sus novelas. Y como estaba buscando algo cortito para poder llevármelo a la playa terminé decantándome por este Alas de fuego, que no he leído, he devorado bajo los rayitos de sol. Así que muchas gracias Sombrerera por haberme dado el impulso definitivo para animarme con Laura Gallego.

Este libro me ha encantado, sobre todo por su personaje principal, el ángel Ahriel. Un personaje que vemos evolucionar, que vemos cambiar a lo largo de la novela de forma drástica. Si al principio de la novela, ella es un ángel noble y justo, y al mismo tiempo, arrogante, altiva, completamente segura de sí misma, ajena a cualquier sentimiento, porque los sentimientos están vedados para los ángeles, su paso por Gorlian la va a cambiar de forma radical. La traición de Marla, conocer los engendros que pueblan ese reino, conocer a Bram... Todas estas situaciones le harán descubrir que puede sentir, le harán darse cuenta de que hasta ahora  no había gozado de la libertad suficiente para pensar por sí misma y poder elegir. Tendrá sentimientos tan parecidos a los humanos que ni siquiera sabrá qué es ella realmente: ¿es ángel o humana? Y ese cambio vendrá acompañado también de un cambio de actitud. Todo rasgo de nobleza o justicia parece haber desaparecido en ella. Se volverá más oscura, más aterradora. La compasión destacará por ausentarse en su carácter.

Me ha gustado especialmente la manera de contar historias de Laura Gallego. Es directa, va al grano, no se anda con florituras. La acción es constante. No hay página en el libro en la que no pase algo. Su estilo es sencillo, fácil de leer. Realmente sabe atraparte y sin que te des cuenta, estás enganchada a la historia y no puedes soltar el libro hasta el final. Un único pero puedo ponerle y es que no profundiza mucho en los personajes, salvo en el caso de Ahriel. Los conocemos, pero a grandes rasgos. No tiene mucho interés por mostrarnos más.

Otra cosa de agradecer es que, pese a tener una segunda parte, que voy a leer seguro, la historia está acabada. No te deja en tensión por saber qué va a ocurrir en el siguiente libro. En este libro empieza una historia y la termina. Ya en el segundo, la trama será distinta. Y esto, hoy día, se agradece mucho. Al menos no tienes que lanzarte a la búsqueda del siguiente libro para ver cómo termina la historia. 

Para terminar sólo puedo decir que me ha gustado tanto que pienso volver a repetir con la autora. Estoy esperando que Alas Negras esté libre en la biblioteca para continuar la historia de Ahriel, pero luego, seguro, vendrán más.