Y septiembre me fue...

¡Cómo corre el año! Que ya se le está viendo el final... Y con otro mes acabado, toca hacer balance. No son mucho los libros leídos en esta ocasión, que con el inicio de curso de mi hija más de una tarde he estado de compras del material escolar, que parece que en el instituto (ays, sí, el instituto, ya no es tan pequeña...) les gusta decir las cosas a cuentagotas. Y además los libros de las opos cada vez me ocupan más tiempo... Aunque cada vez me entero de menos...

Pero no me enrollo más y ahí van mis lecturas:

• La separación de Dinah Jefferies
• El aprendiz de conspirador de Pío Baroja 
• Ama de casa sale de compras (de 9 a 12 a.m.) de Elisa Cotarelo 
• Café y cigarrillos para un funeral de Roberto Martínez Guzmán
•  Y los ocho capítulos que leo todos los meses de Don Quijote, que ahora he caído que nunca cuento estos capítulos en el balance mensual.

Llevo bastante tiempo con Las legiones malditas de Santiago Posteguillo. Y no porque no me esté gustando. Entre que es tocho y me falta tiempo... Que si no, ya lo hubiera devorado. Y también he empezado, por culpa de una visita a la biblioteca con mi hija, Palmeras en la nieve de Luz Gabás. Como tarda tanto en decidirse... 

Y esta vez no puedo hablar de pelis ni de series, que poco estoy viendo la tele últimamente. Mi único intento ha sido con Mar de plástico pero abandoné en el primer episodio. Y poco más que yo recuerde ahora mismo. Y si no lo recuerdo es que poca huella me ha dejado.

Sí sigue acompañándome la música, que no me puede faltar en mis caminatas diarias.