Fueron los duques los que ordenaron que trajesen a don Quijote y Sancho de nuevo a su palacio, con el único objeto de seguir burlándose de ellos. Don Quijote en esta segunda parte, apenas ha dejado trabajar a su imaginación. Aquí no ha habido molinos que ha convertido en gigantes. Aquí ha encontrado a gente siempre dispuesta a engañarle, dispuesta a burlarse de él.
Cuando llegan a palacio se encuentran con el funeral de Altisidora. Y culpan de su muerte a don Quijote. Pero aún puede ser devuelta a la vida. Pero será nuevamente Sancho quien tenga que sufrir para que Altisidora "resucite".
-¡Ea, ministros de esta casa, altos y bajos, grandes y chicos, acudid unos tras otros y sellad el rostro de Sancho con veinte y cuatro mamonas, y doce pellizcos y seis alfilerazos en brazos y lomos, que en esta ceremonia consiste la salud de Altisidora!
Pero Sancho, el pobre, no estará por la labor...
-¡Voto a tal, así me deje yo sellar el rostro ni manosearme la cara como volverme moro! ¡Cuerpo de mí! ¿Qué tiene que ver manosearme el rostro con la resurreción desta doncella? Regostóse la vieja a los bledos. Encantan a Dulcinea, y azótanme para que se desencante; muérese Altisidora de males que Dios quiso darle, y hanla de resucitar hacerme a mí veinte y cuatro mamonas, y acribarme el cuerpo a alfilerazos y acardenalarme los brazos a pellizcos. ¡Esas burlas, a un cuñado, que yo soy perro viejo, y no hay conmigo tus, tus!
Don Quijote intentará convencerle.
-Ten paciencia, hijo, y da gusto a estos señores, y muchas gracias al cielo por haber puesto tal virtud en tu persona, que con el martirio della desencantes los encantados y resucites los muertos.
Y finalmente será sometido al martirio...
Finalmente, todas las dueñas le sellaron, y otra mucha gente de casa le pellizcaron; pero lo que él no pudo sufrir fue el punzamiento de los alfileres; y así, se levantó de la silla, al parecer mohíno, y, asiendo de una hacha encendida que junto a él estaba, dio tras las dueñas, y tras todos su verdugos, diciendo:
-¡Afuera, ministros infernales, que no soy yo de bronce, para no sentir tan extraordinarios martirios!
Y Altisidora resucitará, aprovechando así don Quijote para recordarle los azotes que aún debe darse para desencantar a Dulcinea.
En esto, Altisidora, que debía de estar cansada por haber estado tanto tiempo supina, se volvió de un lado; visto lo cual por los circunstantes, casi todos a una voz dijeron:
-¡Viva es Altisidora! ¡Altisidora vive!
Mandó Radamanto a Sancho que depusiese la ira, pues ya se había alcanzado el intento que se procuraba.
Así como don Quijote vio rebullir a Altisidora, se fue a poner de rodillas delante de Sancho, diciéndole:
-Agora es tiempo, hijo de mis entrañas, no que escudero mío, que te des algunos de los azotes que estás obligado a dar por el desencanto de Dulcinea. Ahora, digo, que es el tiempo donde tienes sazonada la virtud, y con eficacia de obrar el bien que de ti se espera.
Y las primeras palabras de Altisidora se dirigen a don Quijote, remarcando su crueldad y agradeciéndole a Sancho su sacrificio.
-Dios te lo perdone, desamorado caballero, pues por tu crueldad he estado en el otro mundo, a mi parecer, más de mil años; y a ti, ¡oh el más compasivo escudero que contiene el orbe!, te agradezco la vida que poseo. Dispón desde hoy más, amigo Sancho, de seis camisas mías que te mando para que hagas otras seis para ti; y, si no son todas sanas, a lo menos son todas limpias.
Capítulo LXX:
El pobre Sancho quiere descansar y dormir, después de todo lo sufrido pero don Quijote no para de preguntarle y él da su atinada opinión sobre Altisidora.
Reparador es el sueño para Sancho:Muriérase ella en hora buena cuanto quisiera y como quisiera -respondió Sancho-, y dejárame a mí en mi casa, pues ni yo la enamoré ni la desdeñé en mi vida. Yo no sé ni puedo pensar cómo sea que la salud de Altisidora, doncella más antojadiza que discreta, tenga que ver, como otra vez he dicho, con los martirios de Sancho Panza.
...y torno a suplicar a vuesa merced me deje dormir, porque el sueño es alivio de las miserias de los que las tienen despiertas.
Aprovecha Cervantes el sueño de nuestros protagonistas para volver a introducir a Cide Hamete, que explica cómo los duques prepararon el engaño. Y aprovecha también para burlarse de ellos.
...que tiene para sí ser tan locos los burladores como los burlados, y que no estaban los duques dos dedos de parecer tontos, pues tanto ahínco ponían en burlarse de dos tontos.
Es Altisidora quien entra en el lecho donde descansa don Quijote y Sancho despertándolos. Ella sigue con su engaño. Cuando Sancho le pregunta sobre el infierno, ésta da una visión un tanto quevedesca de éste:
-La verdad que os diga -respondió Altisidora-, yo no debí de morir del todo, pues no entré en el infierno; que, si allá entrara, una por una no pudiera salir dél, aunque quisiera. La verdad es que llegué a la puerta, adonde estaban jugando hasta una docena de diablos a la pelota, todos en calzas y en jubón, con valonas guarnecidas con puntas de randas flamencas, y con unas vueltas de lo mismo, que les servían de puños, con cuatro dedos de brazo de fuera, porque pareciesen las manos más largas, en las cuales tenían unas palas de fuego; y lo que más me admiró fue que les servían, en lugar de pelotas, libros, al parecer, llenos de viento y de borra, cosa maravillosa y nueva; pero esto no me admiró tanto como el ver que, siendo natural de los jugadores el alegrarse los gananciosos y entristecerse los que pierden, allí en aquel juego todos gruñían, todos regañaban y todos se maldecían.
-Eso no es maravilla -respondió Sancho-, porque los diablos, jueguen o no jueguen, nunca pueden estar contentos, ganen o no ganen.
-Así debe de ser -respondió Altisidora-; mas hay otra cosa que también me admira, quiero decir me admiró entonces, y fue que al primer voleo no quedaba pelota en pie, ni de provecho para servir otra vez; y así, menudeaban libros nuevos y viejos, que era una maravilla. A uno dellos, nuevo, flamante y bien encuadernado, le dieron un papirotazo que le sacaron las tripas y le esparcieron las hojas. Dijo un diablo a otro: ''Mirad qué libro es ése''. Y el diablo le respondió: ''Ésta es la Segunda parte de la historia de don Quijote de la Mancha, no compuesta por Cide Hamete, su primer autor, sino por un aragonés, que él dice ser natural de Tordesillas''. ''Quitádmele de ahí -respondió el otro diablo-, y metedle en los abismos del infierno: no le vean más mis ojos''. ''¿Tan malo es?'', respondió el otro. ''Tan malo -replicó el primero-, que si de propósito yo mismo me pusiera a hacerle peor, no acertara''. Prosiguieron su juego, peloteando otros libros, y yo, por haber oído nombrar a don Quijote, a quien tanto adamo y quiero, procuré que se me quedase en la memoria esta visión.
-Visión debió de ser, sin duda -dijo don Quijote-, porque no hay otro yo en el mundo, y ya esa historia anda por acá de mano en mano, pero no para en ninguna, porque todos la dan del pie. Yo no me he alterado en oír que ando como cuerpo fantástico por las tinieblas del abismo, ni por la claridad de la tierra, porque no soy aquel de quien esa historia trata. Si ella fuere buena, fiel y verdadera, tendrá siglos de vida; pero si fuere mala, de su parto a la sepultura no será muy largo el camino.
Calla don Quijote a Altisidora recordándole que aún su corazón sigue perteneciendo a Dulcinea. Y ante estas palabras Altisidora no puede evitar su enfado y contarle a nuestro caballero toda la verdad:
-¡Vive el Señor, don bacallao, alma de almirez, cuesco de dátil, más terco y duro que villano rogado cuando tiene la suya sobre el hito, que si arremeto a vos, que os tengo de sacar los ojos! ¿Pensáis por ventura, don vencido y don molido a palos, que yo me he muerto por vos? Todo lo que habéis visto esta noche ha sido fingido; que no soy yo mujer que por semejantes camellos había de dejar que me doliese un negro de la uña, cuanto más morirme.
Cuando los duques le preguntan a don Quijote sobre Altisidora, éste sólo le dice lo que realmente piensa de ella. Y también Sancho.
-Señora mía, sepa Vuestra Señoría que todo el mal desta doncella nace de ociosidad, cuyo remedio es la ocupación honesta y continua. Ella me ha dicho aquí que se usan randas en el infierno; y, pues ella las debe de saber hacer, no las deje de la mano, que, ocupada en menear los palillos, no se menearán en su imaginación la imagen o imágines de lo que bien quiere; y ésta es la verdad, éste mi parecer y éste es mi consejo.
-Y el mío -añadió Sancho-, pues no he visto en toda mi vida randera que por amor se haya muerto; que las doncellas ocupadas más ponen sus pensamientos en acabar sus tareas que en pensar en sus amores. Por mí lo digo, pues, mientras estoy cavando, no me acuerdo de mi oíslo; digo, de mi Teresa Panza, a quien quiero más que a las pestañas de mis ojos.
¡Disfrútalo mucho que ya no te queda tanto! Un besote :)
ResponderEliminarDisfruta el resto del camino. Deseando leer tus conclusiones finales
ResponderEliminarBesos
A los duques tenía que haberles caído una buena, pero bueno...
ResponderEliminarBesos!
Ahí vas poco a poco con tu propósito, espero que estés disfrutando mucho, yo no me animo con la lectura y con los pedazos que pones con palabras tan antiguas se me hace cuesta arriba fijo.
ResponderEliminarBesos =)
Vamoooosssss, que ya está chupado!!!
ResponderEliminarYa te queda poco!
ResponderEliminarwooow! Don Quijote! Este libro me lo tengo que leer obligado en mi curso (Primero de bachillerato) creo que se me va a hacer un poco pesado jajajjaa Saludos y besos!
ResponderEliminarEn serio serio serio, recopila los posts y publica, El Quijote, versión comentada por Margari!! Besos.
ResponderEliminarya sabes que me encantan estas entradas ^^
ResponderEliminar<3
Espero que lo sigáis disfrutando!
ResponderEliminarUn beso!
Ya casi lo tienes acabado! Besitos
ResponderEliminarNo te queda nada !!
ResponderEliminarSiempre he pensado que sería muy interesante poder leer reseñas de este tipo de libros!
ResponderEliminarY una del quijote más que mejor.
Me gusta compartir opiniones de libros así!
Me gusta tu blog! Te sigo por email!
Besos, nos leemos :D
Hola! Espero que disfrutes mucho de lo que te queda por leer :)
ResponderEliminarBesos!
Disfruta de la lectura.
ResponderEliminarBesotes