María Reig
Suma, 2019
Madrid, primeras décadas del siglo pasado. Elisa Montero, aunque de origen humilde, es criada desde niña por su madrina, una adinerada y misteriosa mujer perteneciente a la alta burguesía madrileña. La sensación de no pertenecer a ningún lugar y de cierta rebeldía ante los designios que otros han trazado para ella será algo que marcará su vida.Elisa no solo buscará liberarse de las limitaciones que le imponen su condición de mujer y su posición social para lograr convertirse en periodista, sino que intentará tomar las riendas de su destino y entregarse al verdadero amor. Como testigo, la rabiosa y convulsa actualidad de una España entre guerras que la acompañará en su lucha por conocerse a sí misma y sobreponerse a sus propios prejuicios.
Papel y tinta es una novela que he disfrutado de principio a fin. Me ha conquistado la historia de Elisa Montero, a quien conocemos desde niña. Una niña curiosa, despierta, inquieta. Unas características que irán aumentando a medida que va creciendo. Su gran sueño será convertirse en periodista, pero tendrá que luchar con las convenciones de la época. Y sobre todo, con su tía, Manuela Montero, quien la está criando y ya tiene sus propios planes para ella. Planes que, evidentemente, pasan por una buena boda. Y ahí estará Elisa, sin saber si lo correcto es luchar por sus sueños o seguir los dictados de su tía, lo que la sociedad espera de ella. Y esa será la lucha que va a mantener a lo largo de toda la novela, intentando siempre hacer lo correcto, equivocándose en ocasiones, causando más enredos que complicarán su vida.
Afortunadamente, contará con la ayuda de dos amigas. Catalina Folch, por un lado, que encarna a esa mujer independiente, que empieza a surgir a principios del siglo XX. Una mujer luchadora, que quiere valerse por sí misma. Una mujer fuerte, que se ve obligada en esta época a ocultar sus verdaderos sentimientos. Por otro lado, tenemos a Benedetta de Luca, que es lo totalmente opuesto. Ella se mantiene fiel a las tradiciones, a las costumbres. Su principal objetivo es casarse bien y tener una familia. Lo que se espera de la mujer en esta época.
La recreación del Madrid de la época es absolutamente maravillosa. Entraremos con Elisa en las tertulias más importantes donde se citaban los más afamados escritores, en las cafeterías más importantes, en el casino, en la biblioteca, en los cabarets.....
También seremos testigos de los continuos cambios de gobierno que vivió España a comienzos del siglo XX. Y de los primeros logros de la mujer, consiguiendo, aunque fuera una minoría, el derecho al voto. Y el derecho a la educación, gracias a la labor de Maria de Maeztu con su Residencia de Señoritas.
También veremos la importancia que tenía el periodismo en la época y cómo éste se veía afectado por los continuos cambios de gobierno. Y cómo tenía que luchar con la censura que ya había en la época.
Me ha sorprendido muy gratamente María Reig con ésta, su primera novela. Con una prosa ágil, sencilla y fluida, ha logrado meterme de lleno en esta novela y que empatice desde el primer momento con Elisa. Que me crea totalmente a este personaje, que toma sus propias decisiones, que unas veces acierta y otras se equivoca. Pero que aprende con cada paso que da. Y ha conseguido María Reig también, y de forma que parece fácil, pero no lo es, que me traslade al Madrid de la época. Que ande, corra y viva por sus calles, que sienta su gente, que sea testigo de muchos acontecimientos importantes en la historia de España.
Una novela absolutamente recomendable, que va a estar entre mis mejores lecturas del año, sin duda.