lunes, 23 de noviembre de 2015

Leemos el Quijote (2º parte): Capítulo LXXI y capítulo LXXII

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Capítulo LXXI:

En este capítulo don Quijote sigue mostrándose triste, por haber sido vencido y obligado a abandonar su condición de caballero. Pero también contento, al creer realmente en el poder de Sancho para desencantar a Dulcinea.  Pero como Sancho se lamenta por no haber cobrado nada desencantando a Altisidora, don Quijote sí estará dispuesto a pagarle. Y ahí verá el escudero el negocio del siglo. Porque ahora sí Sancho estará dispuesto a darse los azotes si don Quijote le paga. Pero nuestro Sancho, que de tonto no tiene un pelo, no se dará los azotes. Será la flora del lugar la que sufra los azotes de Sancho. Y engañará a nuestro caballero. Un poco egoísta se muestra Sancho en esta parte.
Hasta seis o ocho se habría dado Sancho, cuando le pareció ser pesada la burla y muy barato el precio della, y, deteniéndose un poco, dijo a su amo que se llamaba a engaño, porque merecía cada azote de aquéllos ser pagado a medio real, no que a cuartillo.

-Prosigue, Sancho amigo, y no desmayes -le dijo don Quijote-, que yo doblo la parada del precio.

-Dese modo -dijo Sancho-, ¡a la mano de Dios, y lluevan azotes!

Pero el socarrón dejó de dárselos en las espaldas, y daba en los árboles, con unos suspiros de cuando en cuando, que parecía que con cada uno dellos se le arrancaba el alma. Tierna la de don Quijote, temeroso de que no se le acabase la vida, y no consiguiese su deseo por la imprudencia de Sancho, le dijo:

-Por tu vida, amigo, que se quede en este punto este negocio, que me parece muy áspera esta medicina, y será bien dar tiempo al tiempo; que no se ganó Zamora en un hora. Más de mil azotes, si yo no he contado mal, te has dado: bastan por agora; que el asno, hablando a lo grosero, sufre la carga, mas no la sobrecarga.

-No, no, señor -respondió Sancho-, no se ha de decir por mí: "a dineros pagados, brazos quebrados". Apártese vuestra merced otro poco y déjeme dar otros mil azotes siquiera, que a dos levadas déstas habremos cumplido con esta partida, y aún nos sobrará ropa.

-Pues tú te hallas con tan buena disposición -dijo don Quijote-, el cielo te ayude, y pégate, que yo me aparto. 

Capítulo LXXII:

En la venta están Sancho y don Quijote. Resulta curioso que en esta segunda parte don Quijote nunca hay confundido las ventas con castillos. Aquí se encontrarán con un personaje que aparece en el Quijote de Avellaneda, don Álvaro Tarfe. Y se presentarán ante él, para que conozca a los reales don Quijote y Sancho. Y éste los reconocerá como tales, obligándole don Quijote a realizar una declaración judicial en la que lo afirme. Nuestro caballero cree que ese es el único modo para evitar los engaños, las falsedades.
 Yo -dijo don Quijote- no sé si soy bueno, pero sé decir que no soy el malo; para prueba de lo cual quiero que sepa vuesa merced, mi señor don álvaro Tarfe, que en todos los días de mi vida no he estado en Zaragoza; antes, por haberme dicho que ese don Quijote fantástico se había hallado en las justas desa ciudad, no quise yo entrar en ella, por sacar a las barbas del mundo su mentira; y así, me pasé de claro a Barcelona, archivo de la cortesía, albergue de los estranjeros, hospital de los pobres, patria de los valientes, venganza de los ofendidos y correspondencia grata de firmes amistades, y, en sitio y en belleza, única. Y, aunque los sucesos que en ella me han sucedido no son de mucho gusto, sino de mucha pesadumbre, los llevo sin ella, sólo por haberla visto. Finalmente, señor don álvaro Tarfe, yo soy don Quijote de la Mancha, el mismo que dice la fama, y no ese desventurado que ha querido usurpar mi nombre y honrarse con mis pensamientos. A vuestra merced suplico, por lo que debe a ser caballero, sea servido de hacer una declaración ante el alcalde deste lugar, de que vuestra merced no me ha visto en todos los días de su vida hasta agora, y de que yo no soy el don Quijote impreso en la segunda parte, ni este Sancho Panza mi escudero es aquél que vuestra merced conoció.

-Eso haré yo de muy buena gana -respondió don álvaro-, puesto que cause admiración ver dos don Quijotes y dos Sanchos a un mismo tiempo, tan conformes en los nombres como diferentes en las acciones; y vuelvo a decir y me afirmo que no he visto lo que he visto, ni ha pasado por mí lo que ha pasado.
Y abandonan la venta y se dirigen ya, por fin, a su aldea. Y ante ella, Sancho expresa su alegría por regresar manifestando los motivos que le llevaron a acompañar a don Quijote, motivos sobre todo económicos. Y también alude a don Quijote, del que dice que regresa "vencedor de sí mismo". Porque regresa admitiendo su derrota, teniendo que abandonar así esos ideales caballerescos que son los que dan sentido a su vida. Aunque ahora se propone llevar una vida pastoril. 
-Abre los ojos, deseada patria, y mira que vuelve a ti Sancho Panza, tu hijo, si no muy rico, muy bien azotado. Abre los brazos y recibe también tu hijo don Quijote, que si viene vencido de los brazos ajenos, viene vencedor de sí mismo; que, según él me ha dicho, es el mayor vencimiento que desearse puede. Dineros llevo, porque si buenos azotes me daban, bien caballero me iba.

-Déjate desas sandeces -dijo don Quijote-, y vamos con pie derecho a entrar en nuestro lugar, donde daremos vado a nuestras imaginaciones, y la traza que en la pastoral vida pensamos ejercitar.

11 comentarios:

  1. "El Quijote" es uno de mis grandes pendientes. La verdad que me impone un poco. Gracias por acercármelo.
    Besos!!

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  2. Cada vez que leo tu resumen del Quijote, pienso que tengo que leerlo. Yo leí hace mil años una versión adaptada a juvenil. Vaya ni punto de comparación.
    UN besote.

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  3. A ver si en 2016 soy capaz de terminarlo...
    Besos.

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  4. "Vencedor de sí mismo" marca esa expresión, eso sí que no lo había olvidado, también Sancho viene cambiado aunque aquí creo que aún no lo sabe. Besos :)

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  5. ¡Qué bien lo llevas! Espero que lo sigas disfrutando. Un besote :)

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  6. Que fuerza de voluntad tienes, yo no sería capaz, sigue disfrutando.

    Un beso =)

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  7. Ay! Qué poquito te queda. El final es lo mejor, me gustó mucho :-)
    Besos!

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  8. Yo querría releerlo de nuevo, pero bfff, tengo muchas cosas antes que me apetecen más.
    Besos.

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  9. Y ahí siguues, semana tras semana!!que bien!
    Un beso!

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  10. Me sigue pareciendo increíble que lo leas entero. Yo algún día también lo haré jajajaja
    Un beso :))

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¡Muchísimas gracias por vuestros comentarios!