La Gaviota
Fernán Caballero (Cecilia Böhl de Faber)
Cátedra, 2006
Con "La gaviota" se abre en España el camino hacia la novela realista del siglo XIX. Es al mismo tiempo una novela de costumbres, una novela regional y, en cierto sentido, de tesis. A la manera de Balzac, por quien la autora siente gran admiración, trata de presentar de forma realista conductas humanas enmarcadas en un determinado contexto histórico y social. Su apoyo a determinadas opciones religiosas (catolicismo tradicional), morales (condena del amor-pasión y del adulterio), políticas (visión irrisoria de los políticos liberales) y de clase (sublimación de la conducta de los nobles) le valió la crítica negativa de ciertos intelectuales cuyos prejuicios ideológicos primaron sobre la calidad artística del texto.
Leí esta novela en mis años de facultad (ya ha llovido) y recuerdo que no la disfruté mucho (cuando digo esto es que no me gustó, no sé por qué intento suavizarlo...), así que he aprovechado el reto de Nitocris y le he dado una nueva oportunidad. ¿Habré cambiado de opinión?
La gaviota es una novela costumbrista, que destaca, sobre todo, por realizar una magnífica descripción del ambiente, por el contraste que insiste en subrayar entre el mundo popular y el aristocrático, y por saber reflejar a la perfección la realidad cotidiana de aquellos años.
Y dicho esto, tengo que reconocer que su lectura me ha aburrido. Se me ha hecho larga y tediosa. Y demasiado moralizante. Se le nota a la autora de qué pie cojea... Y tanta alabanza a lo español y el desprecio por lo extranjero ha hecho que me saque de la lectura continuamente. Así que no, no la he disfrutado. Está bien si quieres saber cómo fueron los comienzos del realismo en España, que ese mérito a la autora no podemos quitárselo.
¡Hola! Siento que no te haya convencido. Lo descartaré. Un besote :)
ResponderEliminarMe la llevo apuntada. Un besote
ResponderEliminarBuenos días, Margari.
ResponderEliminarEste año estuve valorando incluir esta novela entre las lecturas del club de lectura que dirijo. Después de leerme me alegra no haberlo hecho. Sin embargo, me ha picado la curiosidad. Creo que echaré un ojo al texto para ver el carácter del que hablas.
Un abrazo, y feliz miércoles!!
Leí La gaviota en 1982 y la verdad es que no recuerdo nada. Ni que me gustara ni que me aburriera, pero vamos, que no tenía intención de releer y tras tu reseña, menos aún. No es que le quitemos mérito a la autora, pero los gustos son los gustos y puede que no haya envejecido bien esta novela.
ResponderEliminarUn beso.
Está claro que hay novelas que así que pasen cien años, si no nos gustaron al principio, difícilmente nos harán cambiar de idea con el tiempo, aunque haya excepciones que se deban más a nosotros mismos y al momento que atravesamos que a un libro en concreto, pero pocas.
ResponderEliminarPor lo que has contado, a mí también me hubiera aburrido. Espero que tu siguiente lectura sea mejor.
ResponderEliminarUn beso ;)
Hola, de Fernan Caballero leí hace años Clemencia y tampoco la recuerdo mucho, quería leer algo para meter en el reto de las Inquilinas de Netherfield autores españoles, y había pensado en esta escritora, ahora no sé que hacer, aunque en todo caso buscaría otra novela ya que está no te convenció. Besos.
ResponderEliminarVisto lo visto, esta me la ahorro. Me gusta el costumbrismo pero si hay algo más de chicha. Una que me ahorro.
ResponderEliminarBesotes
Bueno, no me extraña que te haya aburrido y eso que no por ser clásico tiene que serlo, pero no sé porqué de esta en particular, pues no me extraña
ResponderEliminarSi no soy de leer este tipo de libros, pues después de leerte ya sí que lo tengo clarísimo
Besos
Ya que la lectura se torne tediosa 😖 no es un libro que le daría una oportunidad. Gracias por la reseña 💜
ResponderEliminarUn besote desde Plegarias en la Noche
Hola, no he leído al autor, pero la novela si me recuerda a aquellas que nos mandaban obligatorias en el instituto, muchas de ellas un tanto aburridas y, como tú dices, demasiado moralizantes, por lo que no me apetece mucho leerla, así que la dejo pasar.
ResponderEliminarBesos desde Promesas de Amor, nos leemos.
Hola guapísima, ay!!!! qué bien que hayas podido acabar la lectura a pesar del aburrimiento, jeje... Me alegro de que participes en el reto, y qué pena que no te haya vuelto a convencer. Creo que yo seguiré tus pasos y no leeré esta novela, qué ya que lo has pasado mal dos veces por lo menos sirva para algo.
ResponderEliminarMuchas gracias por participar y un besazo enorme.
Está claro que todos los clásicos no envejecen igual, más suerte con el próximo clásico. Besos
ResponderEliminarEste no lo he leído. Me gustan que aparezcan clásicos por los blogs, aunque lamento mucho que, en este caso, el libro te haya parecido un poco tostón jejej. Besos
ResponderEliminarHola, en esta ocasión lo voy a dejar pasar, me recuerda demasiado a mis años de instituto donde me obligaban a leer libros de este estilo y que yo odiaba.
ResponderEliminarBesos desde Promesas de Amor, nos leemos.
Ay, esta es la parte del reto de Nitocris que siempre motiva menos, ¡pero tú ya la has pasado! :-) No sé qué libro elegiré yo...
ResponderEliminarA mí es que el realismo no me llama, así que dudo mucho mucho que la fuera a leer y después de leerte lo dudo más :-D
Un beso, Margari, y feliz semana.
¡Hola! No es un libro que se acerque a nuestros gustos, aunque de vez en cuando nos sumergimos en historias así, pero viendo que te ha aburrido, lo dejamos pasar.
ResponderEliminarBesos
La leí hace años porque quería leer algo de Fernán Caballero. Recuerdo que no terminó de convencerme y no la veo como para relectura. Besos.
ResponderEliminarUna novela importante, una novela nuestra, solo por eso y por mucho más merece ser leída. Gracias Margari.
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