El orden del díaÉric Vuillard
Traducido por Javier Albiñana
Tusquets, 2018
PREMIO GONCOURT 2017. Un relato inquietante acerca de los entresijos del
inicio de la Segunda Guerra Mundial y la implicación de los empresarios
en el ascenso de Hitler al poder.
En febrero de 1933, en el Reichstag tuvo lugar una reunión secreta, que no estaba en el orden del día, en la que los industriales alemanes—entre los que se contaban los dueños de Opel, Krupp, Siemens, IG Farben, Bayer, Telefunken, Agfa y Varta—donaron ingentes cantidades a Hitler para conseguir la estabilidad que él prometía. Desde ese año, Hitler ideó una estrategia de cara a la comunidad internacional para anexionarse Austria «pacíficamente»; para ello, mientras se ganaba la aquiescencia o el silencio de primeros ministros europeos, mantuvo una guerra psicológica con Schuschnigg, el canciller austriaco, hasta que la invasión (un alarde del legendario ejército alemán, que ocultaba graves problemas técnicos) fue un hecho.
Esta novela desvela los mercadeos y vulgares intereses comunes, las falsedades y posverdades, que hicieron posible el ascenso del nazismo y su dominio en Europa hasta la Segunda Guerra Mundial, con las consecuencias de todos conocidas. El orden del día narra de un modo trepidante y muy novedoso, en escenas memorables, las bambalinas del ascenso de Hitler al poder, en una lección de literatura, historia y moral política.
Esperaba más de este libro. He tenido la sensación de estar leyendo notas que fueran a servir para crear una novela más grande, más completa, más ambiciosa. Y aún así he disfrutado de su lectura, gracias, sobre todo, a la maravillosa prosa de su autor.
No nos encontramos aquí con una historia continua. Vuillard recrea en esta novela distintos momentos, no muy conocidos, que explicarían el ascenso al poder de los nazis en Alemania. Hay empresas que aún se mantienen hoy día que colaboraron en este ascenso. ¿Y a cambio de qué? A cambio de estabilidad política, a cambio de luchar contra el comunismo que se estaba extendiendo por Europa, a cambio de acabar con los sindicatos, que no interesaba estos movimientos de lucha por defender los derechos de los trabajadores... Y a cambio, también, de mano de obra barata: los judíos...
Pero no termina de profundizar en estos temas. Y va saltando de un momento a otro, sin ahondar en ninguno de ellos. Y esto ha provocado que me haya sacado de la lectura en más de una ocasión.
Un desierto de hielo
Maite R. Ochotorena
Planeta, 2023
El cadáver del geólogo Björg Stutgard ha aparecido en la base científica noruega Nytt Håp, en la Antártida. Su cuerpo desnudo ha sido depositado en la nieve, con una enorme herida abierta desde el esternón hasta el pubis. Además, con trazos burdos sobre su vientre, alguien ha escrito la palabra «Kripos».
En San Sebastián, Mikel Ibarra, un antiguo investigador criminal, dedica su tiempo a trabajar como guía para los científicos de la base noruega y como buzo para una empresa de la que es socio y que intenta patentar un traje de inmersión submarina capaz de alcanzar profundidades abisales.
Su vida da un vuelco cuando Erika Oblyakov, una agente de la Kripos ?la agencia noruega de investigación criminal?, se pone en contacto con él para proponerle formar parte de la investigación sobre el asesinato de Stutgard.
He disfrutado mucho con esta novela. Con dos personajes principales, Erika y Mikel, muy bien construidos, a los que vamos conociendo poco a poco y encariñándonos con ellos. Dos personajes con vidas difíciles y que se ven unidos para resolver un caso de asesinato que, cada vez, se complica más. Porque una vez que pisan la base de la Antártida, los crímenes se siguen sucediendo, pero pistas hay pocas. Y tampoco encuentran en la base un clima de compañerismo que les ayude en la investigación. Más bien le entorpece. Pero para clima irascible, el que hace fuera de la base, con una noche que nunca acaba y con temperaturas siempre por debajo de los 50 grados. La sensación de soledad, de aislamiento, de desamparo, es inmensa. Y crece a medida que avanzamos páginas en la novela. Encerrados en la base, sin poder salir, a oscuras en muchas ocasiones por fallos en los generadores... Angustioso. Y con un frío que aumenta sin parar, un frío insoportable para el ser humano.
En definitiva, un thriller adictivo, que engancha desde la primera página hasta la última. Y con un mensaje ecológico importante, latente a lo largo de toda la lectura, pero que no interrumpe su ritmo en ningún momento. Muy recomendable.
La última muerte en Goodrow Hill
Santiago Vera
Ediciones B, 2023
Goodrow Hill podría parecer uno de esos lugares apacibles que han vivido tiempos mejores, pero este pequeño pueblo oculto entre la espesura del bosque tiene escrita en su pasado una historia llena de secretos que todos preferirían olvidar.
Hace veinticinco años de aquel caluroso verano en el que un grupo de adolescentes mintió para ocultar algo que ningún adulto debía conocer. Veinticinco años desde que un hombre murió, un niño fue secuestrado y un joven desapareció. Ni siquiera el rugido constante de la presa, que acompaña siempre a los habitantes de Goodrow Hill, logra borrar lo que ocurrió, y menos aun cuando unas extrañas fotografías y una nueva muerte reabren el misterio.
Primera vez que leo a este autor y no va a ser la última. La palabra "adictivo" se le queda corto. Este libro no se lee, se devora. Es de esas lecturas en las que tienes cualquier ratito, aunque sean solo cinco minutos, y tienes que coger el libro para continuar con la historia.
Con capítulos cortos, muy dinámicos, en los que siempre están sucediendo cosas, el autor va a ir presentándonos a los personajes, que no son pocos. Y todos van a estar muy bien perfilados, cada uno con su propia voz, con su propia personalidad. Intercalando pasado y presente, los vamos conociendo y vamos encajando las piezas poco a poco hasta tener el puzle completo. Sí, cuando tienes medio puzle, con las piezas que tienes, puedes averiguar quién es el asesino. Pero no puedes parar de leer. Necesitas el resto de piezas. Necesitas saber cómo y por qué. Además, el autor impone tanto ritmo a sus capítulos y tanta intensidad que no puedes despegarte de sus páginas. ¿Se nota que me ha gustado?